domingo, 16 de agosto de 2015

No 3. Consecuencias y mi primera masturbación


Hay mitos que dicen que una mujer al perder su virginidad ocurre un fenómeno particular que hace que su cuerpo cambie, no sé si sea cierto pero lo que si evidencie es que empece a llamar más la atención al sexo opuesto, sin notarlo demasiado ya no pasaba totalmente desapercibida,lo que era sin duda una muy agradable sensación... me sentía deseada. 


Muchachos del salón, y de otros cursos me miraban más y de vez en cuando recibía algún regalo (dulces por lo general), e incluso invitaciones a cine, o a comer algo, que en principio ignore pues no sabia aún qué quería hacer en este nuevo mundo de posibilidades.

Habían imágenes y escenas rondado mis pensamientos, que tenían que ver con experimentar con otras personas ¿podría ser diferente? o ¿ la sensación seria la misma con cualquier persona?, y ¿si es un hombre con experiencia?.

Mi relación con Javier termino cuando él empezó a ser muy controlador, quería elegir mis amistades por mi, lo cual no me agrado y preferí terminar con la relación, ahora pienso que él intuía mis inquietudes.


-prefiero dejar las cosas así, y así nos nos complicamos- afirme con seguridad que ocultaba tristeza.

-Ja, como quiera, pero después no me venga a buscar- con rabia en cada palabra como ultimo recurso que le quedaba ante mi decisión.

Días después me entere por medio de Evelyn que Javier contaba todas nuestras intimidades a sus amigos, lo que implicaba que por lo menos la mitad de mi salón conocía nuestra historia. Hubo en mi una mezcla de rabia e incertidumbre, con los días llegaban a mi notas anónimas o incluso mensajes en mi cuaderno:

"me dijeron que lo mama rico, ¿cuando me lo mama?", "usted es una puta", "cuando vuelve a abrir las piernas?" ... entre otras.

Lo más extraño es que después que paso mi rabia, al leer esos mensajes mi cuerpo reaccionaba diferente.... esos mensajes hacían que me mojara, mi vagina permanecía húmeda en clases y me sentía incomoda, hicieron que explorara por primera vez con la masturbación, y que de alguna manera me asustara por eso que sentía.

Al llegar una tarde a mi casa, tuve el impulso solo de desnudarme,y explorar mi cuerpo, recordando que las manos de Javier me habían dado a conocer sensaciones inimaginables en mis senos, entonces los frote, y pellizque con delicadeza mis pezones, la sensación me emociono, enseguida imaginando que era su lengua explore con mi dedo indice mi clítoris, y tanto placer me genero que frote con mayor intensidad, e incorpore dos dedos de mi otra mano para meterlos en mi vagina, logrando así que mi placer aumentara; no tarde en lograr un orgasmo delicioso, sin embargo no era lo mismo.

No fue una decisión explicita, todo fluyo y entonces........